Día 1

Domingo 30 de agosto, 16:00 de la tarde, aeropuerto de Valencia, Paulette en el mostrador de facturación y un hombre detrás que le dice que no ha entendido bien lo de las maletas. Que pagar por 2 maletas no quiere decir que puedas llevar más peso, sino que los 23 kilos máximo por pasajero van distribuidos en 2 piezas. Y que me sale más barato pagar la boda y el viaje de novios del príncipe, que pagar por los kilos que llevo de más en la maleta, así que lo que yo vea.

16:10 de la tarde del domingo, Paulette se encuentra en la cafetería del aeropuerto con una maleta sin facturar y desconoce que habrá en la otra cuando llegue a París.
Besos, abrazos y despedidas varias hasta que me subo al avión con overbooking que ha dejado a gente sin poder volar.

Llegada a París sin turbulencias, ni necesidad de rezar para que el avión aterrice sin problemas, y llegada a la residencia. Afortunadamente el señor del mostrador no me ha dejado traer la otra maleta, sino no sé cómo hubiera hecho para subir a la recepción (1 piso) y subir todo a mi habitación (otro piso más). El chico que está en recepción me consigue una especie de protector de colchón de forro polar, sobre el que duermo.